La semana pasada os dejábamos unos consejos para ayudar a nuestros hijos ante los exámenes; en esta ocasión unos cuantos consejos a la hora de realizarlos.
Aunque estos consejos van más orientados a alumnos de secundaria, algunos también son válidos para los más pequeños que se enfrentan a sus primeros exámenes.
Deja los nervios en la puerta del aula.
Deja los nervios en la puerta del aula.
Lee bien todas las preguntas y piensa el tiempo que te puede llevar cada una.
Si alguna pregunta te genera dudas pregunta a tu profesor porque seguramente te las aclarará.
Antes de contestar tienes que leer bien la pregunta varias veces. Busca la palabra clave: explica, define, calcula, encuentra, subraya,... y fíjate si el enunciado te pide varias cosas.
Después de contestar repasa el enunciado y la respuesta.
Tienes que conocer el valor de cada pregunta, porque no puedes dedicar el mismo tiempo a una que valga un punto que a otra que valga tres.
Deja tiempo para repasar las contestaciones.
Si no hay mucho tiempo para responder alguna cuestión debes expresar las ideas básicas aunque sea de manera superficial, así demuestras que sabes lo que se pregunta.
Intenta ser claro y breve.
Presenta un examen organizado, limpio (sin tachones ni borrones), con letra clara y legible y líneas rectas. Deja un espacio en blanco por si surgen nuevas ideas y, por supuesto, cuida la ortografía.
Antes de entregarlo tienes que asegurarte de que has contestado a todas las preguntas, que las respuestas están completas, que no hay errores y que no recuerdas nada más.
En comentarios puedes dejar alguno más.
Gracias por los consejos! Saludos
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